Después de los Libertines

Parece que fue hace mil años que los Libertines se separaron, pero en realidad fue en Diciembre de 2005. Desde ese momento surgió un gran debate sobre quien se acabaría llevando el gato al agua, si Pete Doherty o Carl Barât.
La corriente popular estaba con Doherty por las mismas razones que hicieron a la crítica confiar más Barât, la desastrosa vida que llevaba y que parecía que no le dejaría trabajar en nada que valiese la pena.

El resultado fue de dos grandes discos. Aunque personalmente la belleza deslabazada y el encanto que consiguió Doherty con su 'Down in Albion' me parece un logro superior al de Dirty Pretty Things con 'Waterloo to anywhere' que de todas formas es un discazo plagado de hits.

La prensa en general se lo tomó como un empate técnico, pero el morbo del debate nunca se fue. Sus segundos discos fueron muy esperados y fue donde el empate se deshizo a favor de Babyshambles. Su disco fue un merecido éxito de crítica y público; mientras que el de Dirty Pretty Things fue una gran decepción, lo que probablemente desembocó en su separación a finales del año pasado.

En estos momentos Babyshambles se encuentra grabando su tercer largo, y con colaboradores de lujo como Graham Coxon de Blur.
Todo esto deja claro que los que dudaron del talento y saber hacer de Pete Doherty se equivocaban, y que más allá de que se haya convertido en una figura del 'Que me dices', y que por ello sea rechazado e infravalorado por un amplio sector de la música independiente, no debería haber duda de que se merece el mayor de los respetos musicalmente hablando.