Daniel Craig, (el que ahora se ha convertido en ese James Bond visceral y completamente animal que sucedió a Brosnan) no siempre estuvo tan fuerte. Aunque los trajes, eso sí, le quedaban igual de planchados.
Su papel es el de un traficante de cocaina bastante listo y que no se mete en líos que, sorpresa, está pensando en retirarse (cómo son las cosas), pero al que van a acabar liando para que consiga vender un millón de pastillas robadas a (redoble de tambores) unos nacionalistas serbios independentistas buscados por la ONU. Ah, y para que encuentre a la hija de un mafioso. Casi nada.
Realmente, si antes de verla les dijese que es de Guy Ritchie podrían creerme perfectamente, pues la dirección corre a cargo del productor de Snatch y de Lock and Stock, la trama lleva ese mismo ritmo frenético, plagada de personajes y con aventuras, desventuras y humor negro para parar a la RENFE entera.
Ah, y sale Sienna Miller en ropa interior. ¿Se lo van a perder?
Un digno 7
La pista del trailer es verdaderamente prometedora jajaj
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