martes, 2 de junio de 2009
Disco malditaseamente bueno de la semana: "Doolittle" - Pixies (1989)
Si Black Francis, el orondo líder de Pixies, nunca tuvo problemas mentales, lo disimula muy bien. Llevado en volandas por esos cambios de ritmo marca de la casa, Doolittle es de una bipolaridad encantadora.
Como decía, Francis en ocasiones suena perezoso, como en I bleed, (donde si de veras está sangrando, no le debe doler mucho) para luego, de repente, soltar dentelladas de maníaco como las de Crackity Jones. Puede sonar dulce y encantador, como en Here comes your man, igualito que el cuñado o el sobrino que todo el mundo desearía, para después dejar caer un sinuoso everything is gonna burn en medio de Monkey´s gone to heaven, del que nadie dudaría un segundo que va en serio.
Surfer Rosa, el álbum anterior, también es malditaseamente bueno, y junto con éste, la otra pieza clave de los Pixies, pero si aquel era abrasivo, éste es como que alguien te arroje un puñado de arena a los ojos, para que luego te la limpie amorosamente... y ahí está su magia.
Doolittle tiene de todo un poco, y todo bueno: hay estilo a raudales, hay himnos pop, hay mala leche, hay pasión y también hay peligro. Busquen todo eso, no les costará mucho encontrarlo.
DESCARGA DIRECTA
Canciones destacadas: Pues casi todas, joder.
Escuchar preferentemente: Para ponerse de buen rollo y de mala leche, todo a la vez.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Hable ahora o calle para siempre.